La proliferación en el municipio de Martos de viviendas construidas en suelo no urbanizable, ha llevado al área de urbanismo a poner en marcha una ordenanza para la regularización de dichas edificaciones. Este proceso se inicia en relación a la problemática de tipo sancionador que puede antojarse compleja, además de acarrear consecuencias graves.
Debido a ello, el equipo de gobierno a petición de los ciudadanos comenzó durante el pasado año a trabajar en la redacción de esta normativa, que finalmente pudo culminarse el pasado mes de julio. El resultado no es más que una ordenanza fiscal que permite regular estos procedimientos, y en el que se incluyen las tasas oficiales para llevarlos a cabo.
Para aquellas personas que presumiblemente se encuentren en esta situación y puedan verse beneficiados de esta ordenanza, se aconseja se dirijan al área de urbanismo en la que se cotejará si las características se cumplen de mano de profesionales. Ya que como nos exponía Emilio Torres, concejal de esta área es recomendable informarse previamente si nuestra vivienda cumple las especificaciones de la normativa vigente. Igualmente manifestaba que “es a través de este instrumento como los ciudadanos podrán regularizar viviendas que de otra forma no podrían ser regularizadas”
En cuanto a las condiciones de las que deben disponer las viviendas, Emilio Torres nos aclaraba que “a grandes rasgos, por una parte está el trámite administrativo en el cual hay que presentar toda una documentación. Es decir, se han elaborado una serie de listas de chequeo para facilitar al administrado que documentación tiene que ir preparando. Y por otro lado, los servicios técnicos tienen que comprobar que la vivienda reúne determinadas condiciones de seguridad, higiene y salubridad”
Con esto nos transmitía que no existe una fórmula general, si no que las situaciones deben ser comprobadas una por una, ya que no todo el mundo puede beneficiarse de estas ordenanzas. A modo de ejemplo tenemos a aquellas viviendas que están inmersas en un expediente sancionador, o a aquellas que están construidas en suelos protegidos.